El pasado sábado 30 de junio de 2018 tuvo lugar en Madrid una jornada extraordinaria de Delegados de Apostolado Seglar de las Diócesis de España. Mn. Luis Manuel Romero, director del Secretariado de la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar (CEAS), explicó el motivo de esta jornada extraordinaria.
Por su parte, el obispo Javier Salinas Viñals, responsable del secretariado, explicó que los obispos de la Conferencia Episcopal Española quieren escuchar a los laicos. Monseñor Salinas explicó que «somos conscientes de que la Iglesia es como un mosaico que tiene muchas piezas y colores, con muchas organizaciones con diferentes sensibilidades y modos de evangelizar». Por este motivo, añadió, «los obispos quieren escuchar a los laicos que se encuentran en el trabajo diario de evangelización y saber de sus dificultades».
En la misma línea dijo que los obispos tienen intención de poner en marcha el laicado, y por ello se quiere convocar un congreso que pueda ayudar a ver cómo la iglesia militante encuentra su lugar en la sociedad y puede dar un testimonio claro de Jesucristo en la vida diaria de los ciudadanos.
Monseñor Salinas indicó que «se tiene la idea que el laico se encuentra en las catacumbas, que está escondido, que no actúa en la sociedad, hay que recuperar la acción y el testimonio de los seguidores de Jesucristo».
A la vez, «también queremos buscar la comunión entre todos y todas las organizaciones laicales y de los laicos no organizados, todos y todas puedan encontrar un lugar donde poder manifestar su testimonio de fe y de militancia cristiana», agregó Salinas. Por estos motivos, anunció la voluntad de hacer un congreso del Apostolado Seglar.
El encuentro del sábado sirvió para dar ideas para organizar este congreso previsto para el año 2019. Después de esta introducción, los delegados tuvieron una hora para hablar en asamblea general. Cada uno explicó qué idea de congreso propondrían.
Entre las ideas más repetidas estaba aprovechar los congresos anteriores para no repetir que fuera un congreso para explicar la función del laico en la iglesia. Los delegados también propusieron ayudar a la participación de los laicos no organizados, ya que también son muchos y pueden aportar mucho para la vida de la iglesia.
Después de estas propuestas los participantes se dividieron por grupos y trabajaron tres preguntas: objetivos del congreso, temas fundamentales a tratar y qué frutos quisieran obtener. Por la tarde, tuvo lugar la puesta en común, y se acordó organizar otro encuentro en el mes de octubre para empezar a dar forma al congreso.
Fuente: Manuel Díaz Martos, Delegado de Apostolado Seglar del Obisbado de Lleida.