El sábado 27 de octubre, en el Museo Episcopal de Vic, tuvo lugar la inauguración de la exposición Oliba episcopus . La muestra reúne los testimonios materiales y documentales más importantes de la vida de Oliba de Cerdanya que fue conde, monje, abad y, desde 1.018 hasta su muerte en 1046, obispo de Vic.
El cardenal Lluís Martínez Sistach, arzobispo emérito de Barcelona, y los obispos de Solsona y Girona, Xavier Novell y Francesc Pardo acompañaron al obispo de Vic, Romà Casanova, en la inauguración de la exposición. También estaban presentes los vicarios generales de Vic y de Urgell, Mn. David Conde y Mn. Josep Maria Mauri, respectivamente, y la Delegada diocesana de Patrimonio de Urgell Sra. Clara Arbués.
Los directores generales de Asuntos Religiosos, Marcel·lí Joan, y de Patrimonio, Elsa Ibar, llevaban la representación del Gobierno catalán. La Alcadesa de Vic, Anna Erra y el director de la Obra Social de la Caja en la Cataluña central, Jaume Massana, también intervinieron en el acto.
El director del Museo Episcopal de Vic, Mn. Josep Maria Riba inició los parlamentos y dio la bienvenida a todos, enmarcando la exposición en el conjunto del Museo y del proyecto cultural Episcopus que se lleva a cabo en el obispado de Vic.
La exposición fue explicada ampliamente por el conservador del Museo Episcopal de Vic y comisario de la exposición, Dr. Marc Sureda, que destacó entre otras cosas, la presencia de las dos Biblias de Ripoll y de Roda, promovidas por Oliba, que junto con los fragmentos de la Biblia de Fluvià se pueden ver juntas por primera vez. Actualmente se encuentran en la Biblioteca Apostólica Vaticana y la Biblioteca Nacional de París.
Oliba es uno de los personajes eclesiales más relevantes de la Cataluña medieval y de la Europa del siglo XI. Su tarea como obispo fue más allá de las funciones episcopales y es recordado como el iniciador de las asambleas de Paz y Tregua que pacificaron el país y como uno de los padres de la patria.