Fecha: 2 de marzo de 2025
A lo largo de la historia de la Iglesia Católica, los laicos han desempeñado un papel fundamental en la propagación de la fe y en la construcción de una sociedad más justa y de una comunidad cristiana viva y dinámica. Lejos de ser simples espectadores, los laicos están llamados a ser protagonistas activos en la misión evangelizadora, aportando sus experiencias, talentos y perspectivas.
Los laicos, inmersos en las realidades seculares, tienen la oportunidad única de llevar los valores cristianos a las familias, los lugares de trabajo, las comunidades locales y los ámbitos sociales y culturales. ¿Cómo? A través del testimonio personal, viviendo una vida coherente con los valores del Evangelio; participando en actividades evangelizadoras y en el servicio a las familias y al cuidado de la vida; comprometiéndose con la justicia y la cultura del encuentro mediante iniciativas caritativas, educativas y sociales. Los laicos están llamados a ser «poesía social». Todo suma en la construcción y el anuncio del Reino de Dios.
Además, asumen responsabilidades en consejos, actividades y servicios pastorales que enriquecen la vida de la Iglesia con sus dones y talentos. Son un tesoro. Hacen posible un Pueblo de Dios vivo.
El Sínodo sobre la Sinodalidad ha puesto de manifiesto la necesidad de una Iglesia más participativa e inclusiva. En línea con este espíritu sinodal, el 8 de marzo tendrá lugar en Montserrat la X Jornada de Apostolado Seglar de Cataluña con el lema: Laicos en el mundo, testigos de esperanza.
En nuestra diócesis de Sant Feliu de Llobregat caminamos y seguiremos caminando junto al laicado. Los esperamos en al menos cuatro ámbitos: la transmisión de la fe y las vocaciones; el compromiso social, participando activamente en la construcción de una sociedad más justa y solidaria, defendiendo los derechos de los más vulnerables y promoviendo la vida y la dignidad humana; el diálogo interreligioso e intercultural; y la innovación pastoral, buscando nuevas formas de evangelización que respondan a los desafíos contemporáneos, utilizando las nuevas tecnologías y lenguajes creativos. ¡Gracias por ser testigos de esperanza en el mundo!