Los seminaristas fueron recibidos al santuario de la Mare de Déu de Loreto de Tarragona, donde se alojaron, por el P. Mario Buonanno. Acompañados por el obispo auxiliar de Barcelona, Mons. David Abadías, y por el rector del Seminario de Tarragona, Mn. Víctor Mosquera, hicieron una visita espiritual a la Catedral de Tarragona, donde recibieron la gracia jubilar. Por su parte, Mn. Antoni Pérez de Mendiguren, canónigo y arcipreste del Tarragonès, les ofreció una visita en que los explicó las características esenciales de la Catedral desde los ámbitos pastoral y espiritual. Posteriormente, el director del Museu Diocesà de Tarragona, Andreu Muñoz, también les ofreció una visita, en este caso, para conocer los aspectos arqueológicos e históricos de la Catedral.
Después de esta visita, los seminaristas conocieron la realidad de vida comunitaria de los cuatro presbíteros que conviven a la Parroquia de Sant Pere i Sant Pau y que tienen encomendadas cuatro parroquias de la ciudad de Tarragona. Mn. Joan Àguila, provicario general de la pastoral y miembro de este equipo de sacerdotes, les explicó la apuesta pastoral de la archidiócesis a través de las unidades pastorales y de los retos pastorales del futuro de nuestra Iglesia. Sobre este tema, compartieron un diálogo en que se remarcó la necesidad que los padres puedan encontrar vías para vivir su ministerio acompañados fraternalmente para evitar caer en una soledad estéril.
Por la tarde del mismo jueves, los seminaristas asistieron a la celebración de la eucaristía al palacio arzobispal, que fue presidida por el arzobispo Joan Planellas, con quién compartieron un rato de diálogo. La jornada cerró con la participación de los seminaristas al via crucis de la Germandat del Sant Crist de los Gitanos, celebrado a la Parroquia de la Santíssima Trinitat. En este sentido, ellos fueron los encargados de preparar las meditaciones para cada una de las estaciones. Al acabar, participaron también en la procesión de esta Germandat por las calles de la Parte Alta de Tarragona, viendo una pequeña de las expresiones de religiosidad popular que estos días llenan las calles de la ciudad.
El día siguiente, viernes día 11, los seminaristas conocieron el Secretariado diocesano de apostolado del mar – Stella Maris de la mano de su director, Vicenç Veses, y del P. F. Royal, o.c.d., una realidad a veces olvidada pero que hace un gran bien a los marineros que llegan al Puerto de Tarragona. Los seminaristas pudieron visitar un barco que estaba atracado al Puerto y su tripulación.
Finalmente, esta visita de los seminaristas del curso propedéutico a la archidiócesis de Tarragona cerró a Reus, donde rezaron en el santuario de la Mare de Déu de Misericòrdia acompañados del prior de Sant Pere y capellán del santuario, Mn. Joaquim Fortuny. Allá, encomendaron su vocación a la Madre que nos mira con ojos de amor.
Fuente: Arzobispado de Tarragona