Con el lema “Esta Navidad, cada portal importa”, las diez Cáritas con sede en Catalunya han vuelto a sumar esfuerzos para la campaña de Navidad.
La campaña, que estará presente en los principales medios de comunicación de ámbito catalán durante todo el mes de diciembre, es un llamamiento a la colaboración económica de la ciudadanía, para poner en práctica la generosidad con las personas en situación más precaria de una sociedad herida, mucho más pobre, frágil y vulnerable.
El lema de este año pone énfasis en el concepto «portal», porque es donde hace más de 2.000 años nació el niño Jesús. “Jesús se encontraba en un establo, sin gran cosa, algo de paja, una pequeña hoguera y una cuna improvisada. Afortunadamente, y con la ayuda de todas las personas que los visitaron, José, María y su hijo Jesús pudieron salir adelante”, ha explicado Francesc Roig, presidente de Cáritas Catalunya.
Estas fiestas llegan con pocas ganas de luz para muchas familias que Cáritas acompaña en el conjunto de Catalunya, ya que la pobreza afecta a muchos portales y hogares que están junto a nuestra casa. Cada portal, la puerta de cualquier domicilio contiene la historia de una persona o familia. Cáritas ha sido testigo de las graves consecuencias que ha dejado el paso de la COVID-19 en nuestras vidas, pero sobre todo en las vidas de los hogares más vulnerables.
Durante el 2020, las diez Cáritas con sede en Catalunya acompañaron a 141.194 hogares donde viven 272.702 personas, un 26 % más respecto al año 2019. El 44 % de las personas atendidas no tienen una vivienda digna y el 20,2 % viven en hogares que no cuenten con ningún ingreso económico. «En muchos portales de Catalunya no hay mula ni buey, pero hay familias que no llegan a fin de mes», ha advertido el presidente de Cáritas.
A pesar del difícil contexto, la entidad ha recordado que la Navidad es un tiempo de esperanza, de unión, y que es necesario emplear esfuerzos para construir una sociedad mejor. Por todo ello, Cáritas ha invitado a la ciudadanía a construir una sociedad fraterna, en la que aprendamos a mirar a los demás como personas, dignas de los mismos derechos humanos y de la misma capacidad de amar y ser amadas. “Cada persona importa, cada familia, cada vida, tú. Con la solidaridad de todos, podremos darles luz y esperanza”, han concluido desde la entidad.