Fecha: 25 de febrero de 2024 Como decimos, únicamente un corazón libre, cultivado en el ejercicio constante del desprendimiento, y un corazón capaz de entregarse totalmente por amor, podrá reconciliarse con la vocación propia, asumirla, amarla y seguirla. Ese corazón se educa en el desierto. En la ausencia de ruidos se escucha la voz, y en la claridad del día y la noche, se ve la luz. Y en la soledad se aprecia la compañía. La dureza de esas carencias, las pruebas de la vida, hacen brotar...

leer más